Para varias empresas del sector de las criptomonedas, 2022 marcó el final de la línea. Algunas parecen haber desaparecido de la noche a la mañana. Pero los acreedores de Genesis están haciendo llamadas desesperadas para salvar a la criptocorreduría de hundirse en la bancarrota.

Según un informe de Bloomberg, los acreedores de la asediada firma contrataron abogados de reestructuración y están explorando formas de evitar una situación similar a la rápida caída en bancarrota de la criptobolsa FTX. Los bufetes de abogados Proskauer Rose y Kirkland & Ellis están siendo consultados por los grupos de acreedores.

Un portavoz de Genesis fue citado diciendo,

"Nuestro objetivo es resolver la situación actual en el negocio de los préstamos sin necesidad de presentar ningún concurso de acreedores".

Problemas del Génesis

Tras la quiebra de FTX, el brazo de préstamos de criptomonedas del corredor de activos digitales estadounidense Genesis Trading anunció la suspensión de los reembolsos de los clientes. Más tarde se reveló que su negocio de derivados tenía casi $175 millones en fondos bloqueados en una cuenta de operaciones de FTX.

Genesis pasó varios días intentando conseguir $1 mil millones de capital de posibles inversores, lo que fracasó. También se informó de que estaba en conversaciones con Binance para una nueva inyección de efectivo. Sin embargo, la bolsa de criptomonedas decidió pasar de la oferta debido a un conflicto de intereses que algunos de sus negocios podrían crear en el futuro.

El director ejecutivo interino de Genesis, Derar Islim, dijo recientemente a sus clientes que la empresa estaba entablando conversaciones con posibles inversores y con algunos de sus mayores acreedores y prestatarios. Entre ellos, Gemini, dirigida por Winklevoss, y su empresa matriz, Digital Currency Group (DCG). El objetivo principal es "acordar una solución que refuerce la liquidez general de nuestro negocio de préstamos y satisfaga las necesidades de los clientes", explicó Islim en una carta vista por Reuters.

El director general de DCG, Barry Silbert, reveló que el conglomerado debía $575 millones al brazo comercial de Genesis.

El contagio se extiende, la investigación también

La saga de FTX ha llevado a múltiples organismos reguladores de Estados Unidos a iniciar investigaciones no sólo sobre la bolsa de criptomonedas colapsada, sino también sobre otros guardianes centralizados. Según Barron's, la Comisión de Valores de Alabama y otros estados están investigando a Genesis Global Capital por violación de la ley de valores.

Los llamamientos a la claridad regulatoria, además, nunca han sido más fuertes. Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo (BCE), reiteró su postura y consideró que la supervisión de esta clase de activos es una "necesidad absoluta" para la Unión Europea (UE). En Estados Unidos, el colapso del FTX sigue siendo el centro de atención, con una audiencia en el Senado prevista para el 1 de diciembre.

La audiencia del jueves, titulada "Por qué el Congreso debe actuar: Lecciones aprendidas del colapso de FTX", es una de las dos que se centran en la caída de la bolsa de Sam Bankman-Fried.

La presidenta de la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, Maxine Waters, también ha anunciado que tiene previsto celebrar una audiencia el mes que viene para analizar la quiebra de FTX y las consecuencias más amplias para el ecosistema de los activos digitales.